Lo leerás en Círculo de Poesía: décimo aniversario

El proyecto de Círculo de Poesía. Revista electrónica de literatura cumple diez años. Comenzó como un pequeño blog en 2008 y evolucionó hasta convertirse en lo que es ahora. Ha tenido por editores, en sus diferentes épocas, a Carlos Roberto Conde, Alí Calderón, Jorge Mendoza Romero, Roberto Amézquita, Mario Bojórquez, Andrea Muriel, Mijail Lamas y Adalberto García López. La revista ha registrado más de seis y medio millones de visitas situándose como la publicación especializada de mayor alcance en la lengua española. Las ciudades que cuentan con el mayor número de lectores de esta plataforma son Ciudad de México, Guadalajara, Bogotá, Buenos Aires, Madrid, Barcelona, Puebla, Santiago y Quito. Gracias a nuestros lectores de Québec a Ushuaia y de las Islas Galápagos a Portbou.

Con el afán de ser contemporáneos de los poetas del mundo, en Círculo de Poesía hemos buscado acercarnos a otras tradiciones líricas del orbe hispánico. Publicamos antologías y numerosos autores de todos los países hablantes del español. Nunca como hoy se cumplió el ideal del Modernismo de hace más de cien años. De modo paralelo, hemos construido uno de los mayores y más enterados archivos de poesía internacional que existen hoy en cualquier idioma. Esta curiosidad estética nos llevó desde 2006, a diseñar, primero, el Encuentro Iberoamericano de Poesía Ciudad de México y, a partir de 2014, y hasta la fecha, el Encuentro Internacional de Poesía Ciudad de México que ha congregado a más de cien autores de alto perfil de los cinco continentes.

En lo sucesivo, publicaremos poetas, narradores, ensayistas, críticos y traductores de cada uno de los países de Latinoamérica y España para construir ese espacio panhispánico que requiere nuestro tiempo. Las tradiciones nacionales se han quedado cortas, son estrechas. Es momento de ponderar la riqueza y vitalidad de una literatura y un campo literario compuestos por más de quinientos millones de hablantes. Conocernos desde la generosidad de la lectura es una tarea que nos corresponde desde ya.

Nos implica, nos confronta, asimismo, la banalización que sufre lo poético. Por ello estamos comprometidos con la reflexión, con volver a pensar las poéticas, los por qué y los cómo de la escritura que puede identificarse con el marbete de “poesía”. Desde ese lugar de apertura, son bienvenidas en nuestra plataforma las colaboraciones de las más diversas procedencias estéticas y filiaciones grupales. Todos a bordo.

Esta búsqueda constante que anima nuestros esfuerzos, asimismo, desde la duda, desde el repudio de las certezas, se afirma en aquello que creemos y que puede resumirse en lo que ha pensado uno de los directores de nuestro proyecto. Hace poco Mario Bojórquez escribía en su muro de Facebook: “No creo en una poesía vacía de sentido. Creo, incluso, en  una poesía “sin significado” que llegue a producir pasmo estético. Creo en el absurdo, en la inversión sintáctica, en la no correspondencia de número y persona, en la alteración morfológica, no me importa cuál sea el procedimiento. Pero no creo en la falta de sentido. De ningún modo apruebo un adelgazamiento de las posibilidades retóricas de la poesía actual en favor de un lector perezoso. No me interesa que me entienda un lector incapaz de sentir la complejidad de la vida contemporánea. No voy a dialogar con un lector que quiera traducidos, en palabras sencillas, los sentimientos o pensamientos que no son sencillos. Si hay un pensamiento o un sentimiento complejo u oscuro, su dicho no puede ser claro. Tampoco deseo para mi poesía aparentar oscuridad en el panorama luminoso de una verdad. Pero si algo no es fácil de comprender tampoco será fácil su expresión ni en poesía ni en pintura ni en el cine. Entre neobarrocos que rizan el rizo de su vacua pretensión haciendo difícil lo fácil sin necesidad y los inicuos poetas de Instagram que infantilizan y adornan de estupidez el vacío de sus almas, la poesía contemporánea encontrará un camino, un espacio de diálogo superior. Escribir poesía, por ejemplo, después de Octavio Paz en un idioma como el español, requiere de conocer al menos algunas cosas, discutir otras, pensar con claridad de dónde viene el modo en que hacemos poesía y la leemos, de qué material estamos hechos”. Suscribimos eso.

Acompáñenos. Un equipo compuesto por Adalberto García López, Andrea Rivas, Roberto Amézquita, Gustavo Osorio de Ita, Rubén Márquez Máximo, Mijail Lamas, Mario Bojórquez y Alí Calderón trabajará cotidianamente para darle vida a este espacio. Agradecemos, como siempre, el trabajo y la solidaridad de nuestros editores asociados, Federico Díaz Granados en Colombia y Xavier Oquendo en Ecuador. También le damos la bienvenida a los poetas y narradores nicaragüenses Mario Martz y Enrique Delgadillo Lacayo que se harán cargo del micrositio de narrativa “Fabla salvaje”. 

 

Alí Calderón

 

 

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